La ciencia puede decirte cómo clonar un tiranosaurio rex. Las humanidades pueden decirle por qué esto podría ser una mala idea.
Las ciencias proporcionan el método, la innovación y el progreso, mientras que las letras aportan la reflexión, la creatividad y el pensamiento crítico. Las ciencias son el cómo y las letras el porqué de las cosas. Ambas van de la mano, sin la ciencia no entenderíamos el mundo y sin las humanidades no nos comprenderíamos a nosotros mismos.
Además, en el futuro, esta distinción tendrá cada vez menos sentido, ya que en un mundo constantemente cambiante será crucial que ambas áreas trabajen en conjunto por el progreso de la sociedad. Existen ya muchos ámbitos laborales formados por equipos multidisciplinares. Hoy en día, no es el título lo que garantizará un futuro laboral próspero, sino la versatilidad y capacidad de adaptarse a las distintas necesidades de la sociedad.
Entonces, ¿cuál es el camino que debería elegir el estudiante para tener éxito? Antes que nada, aclarar un par de cosas acerca el concepto de éxito en el Islam. Aunque es lícito y legítimo buscar el éxito en este mundo, no hay que olvidar que el verdadero éxito se encuentra en el más allá. Además, es vital recordar lo siguiente: el éxito proviene de Allah, como lo expresó el profeta Shu’ayb:
Mi éxito depende de Dios; a Él me encomiendo y ante Él me arrepiento.
[Sura Hud 11:88]
Es decir, que el éxito no depende únicamente de la decisión que uno tome y los esfuerzos que haga, sino también de la voluntad de Allah. Aun así, el musulmán debe esforzarse por lograr sus objetivos y confiar en que Allah elegirá aquello que es mejor para él. También es aconsejable rezar Salat al-Istikharah, una oración recomendada por nuestro querido Profeta ﷺ para obtener la guía de Dios frente a una decisión importante.
Una vez dicho esto, es importante tener en cuenta los siguientes puntos que mencionaré a continuación a la hora de escoger.
En primer lugar, tus capacidades personales. Hazte la siguiente pregunta: ¿qué se me da bien? Independientemente de que creas que eres bueno o no en algo, siempre habrá algo en lo que sobresalgas más que en otras áreas. Analiza cuáles son tus fortalezas y debilidades para poder luego destacar y contribuir en tu campo. Cada individuo ha sido bendecido con talentos y habilidades personales únicas, y recae en nosotros la responsabilidad de aprovecharlas en beneficio de la sociedad a modo de agradecimiento a Allah.
Hay quienes han nacido para viajar a las estrellas, pero también quienes han nacido para escribir poemas sobre ellas. Anónimo
En segundo lugar, considera tus intereses personales. Reflexiona sobre aquello que te apasiona y disfrutas haciendo para poder rendir al máximo y mantenerte motivado durante tu trayectoria académica y laboral. Imagina una profesión en la que te veas trabajando el resto de tu vida, ya que de lo contrario podrías terminar agotado y frustrado. Si bien es idealista pensar que encontrarás unos estudios o un trabajo que ames por completo, existen carreras o empleos que te resultarán menos pesados y más gratificantes que otros.
En tercer lugar, atiende a las oportunidades y necesidades del mercado laboral. Es importante ser realista en este aspecto, porque algunas profesiones tienen una mayor demanda que otras. Por eso, es recomendable encontrar un equilibrio entre tus habilidades e intereses personales y las demandas del mercado. También es importante recordar que el dinero tiene su valor, pero para el musulmán no debe ser un objetivo en sí mismo, sino un medio para adorar a Allah, ya sea proveyendo para su familia o ayudando a la comunidad.
Sin embargo, ten en cuenta que el mercado y la economía están evolucionando rápidamente, y es posible que la empleabilidad de ciertos títulos universitarios aumente, como es el caso de Filosofía, que será crucial para abordar cuestiones éticas en áreas como la inteligencia artificial. Por tanto, es importante informarse y consultar a expertos sobre las posibles tendencias del mercado en un futuro antes de tomar cualquier decisión, sin perder tampoco de vista quién es quien provee: Allah, Ar-Razzaq (El Proveedor).
En cuarto lugar, es importante elegir algo que complazca a Allah y beneficie a la comunidad musulmana. Por un lado, porque cualquier camino que elijas no tendrá un buen resultado si no complace a Allah. No es lo mismo embarcarse en el arca de Noé, que la paz sea con él, amparada por Allah, que en el Titanic. Por otro lado, todo el conocimiento y las habilidades que adquieras habrán sido en vano si no los has puesto al servicio de la humanidad, especialmente de la Umma. ¡Haz de tus estudios o profesión un acto de adoración!
Las personas más amadas por Allah son aquellas que son más beneficiosas para la gente.
El Profeta Muhammad ﷺ
Por último, antes de concluir el artículo, me gustaría compartir un último mensaje que considero necesario e imprescindible. Más allá del debate entre ciencias o letras y lo que diga nuestro entorno, nuestra comunidad necesita tanto a ingenieros, médicos o informáticos como a historiadores, políticos o economistas que sean musulmanes. Sea cual sea la elección que hagas, debes perseguir el ihsan en todos los aspectos, porque Allah es excelente y ama la excelencia, tal como nos enseñó nuestro Profeta Muhammad ﷺ. Si deseamos tener un impacto positivo en la sociedad, el cambio empieza por nosotros.
Oh Allah, guíanos en nuestro camino hacia el conocimiento y la sabiduría. Ayúdanos a tomar decisiones que sean beneficiosas para nosotros y para nuestra comunidad.
Permítenos buscar la excelencia en todo lo que hagamos, con la intención de complacerte y servir a la humanidad.
Amin
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